abandonado

Te tengo abandonado espacio pero ahora con tanto que hacer en casa+estudios+mandados= super busy girl.

A ver si algun dia de esta semana empiezo a mover este lugar.

Una Nueva Semilla II

El semi-elfo es astuto, no dejara ponerse la venda tan facilmente, y es que parece que sus intensiones van mas alla de hablar con la reina de Lorien. La indiferencia de la elfa no le impiden que sea algo mas "cortes" con ella.



- ¡Nada de vendas! - sonríe

- no podría fiarme de vos si voy ciego por el bosque... una elfa hermosa y embriagadora como vos podría hipnotizarme y hechizarme con su perfume y hacerme caer bajo sus encantos llevando los ojos velados.-





-Perdón pero el asunto que lo trae hasta aquí es el de hablar con mi reina, y si no hace lo que os pido no podré dejaros pasar. Y no os preocupéis, no usare mis hechizos a menos de que quieras atacarme o dañar Lorien-



Lo que el rey de Mordor tenia no era solo una apariencia fria y encatadora, pero sus palabras eran espadas de doble filo cuando se dirigia a las elfas, habia que ser muy cuidadosa para responder a tales alhagos. Evadir los cortejos y cambiarlos por asutos de politicas o seguridad era lo mejor en este caso. Aunque nada de esto serviria para el soberano oscuro.

Habia nacido en Lothlorién, habia sido un principe como lo era Faellas....En el transcurso de el tiempo y los caminos que escogemos pueden pejudicarnos o llevarnos al exito. El soberano habia escogido ser gobernante de un país de tinieblas pero aun asi no olvidaba lo que habia vivido en Lothlorién.



-¿Naciste aquí? pero...cuanto tiempo viviste aquí para decir que conoces Lorien?..-

Faellas guarda silencio y luego continua:

-Lo siento pero no te puedo dejaros pasar...y si no quieres ponerte la venda...-



Faellas sube sus brazos y se estira soltando un bostezo:- Bueno esto nos llevara tiempo, no intentes nada no soy la única que te esta recibiendo-dice mirando a su alrededor.

Ante la insinuaciónes de Khalisto, Gilraen se acerca a él y lo mira con duda...:



-¿No tendrás fiebre? yo me siento muy bien y el clima en Lorien es fresco. Creo que es mejor que tomes un poco de agua.

...- No tengo fiebre, pero el camino fue largo... así que os admitiré un poco de agua antes de que me conduzcáis hasta la reina... -

se sienta en una roca caliza blanca - ¿que nuevas podéis contarme de Lothlorien en mi ausencia centinela?

Gilraen miro hacia uno de los grandes árboles y dio una señal. Al poco tiempo uno de lo soldados llego con una jarra llena de agua y un vaso. Gilraen se acerco a Khalisto y le sirvió el agua:

-Aquí tienes soberano...No es mucho lo que te debe interesar de Lorien.-Gilraen miro atentamente a Khalisto mientras bebía el agua y se quedo observándolo hasta que sus mejillas se sonrojaron, retiro rápidamente su mirada de el y siguió hablando:

-estos asuntos se tratan con la reina, si quieres salir rápido deja que te coloque la venda y ya esta, tu presencia no es de mi agrado tampoco

Una nueva semilla

De los muy pocos elfos que quedaban ya en la Tierra Media, entre los elfos de Lothlorien se podía oír algunos cantos, algunas risas y luces que aun mantenían iluminada a Lorien. Y la luz que parecía irradiar cada elfo era única, como su canto. Los cantos de la dulce Faellas se mezclaban entre el viento y llegaban a los oídos de los viajeros que muy poco podían entrar o salir de allí. Así gano el corazón de uno que hizo que la flor de su vida floreciera cada vez más, pero la primavera paso y los pétalos de esa flor se marchitaron un por uno lentamente y el amor de Faellas se fue con aquel viajero.

Los días y años pasaron, vivir en Lorien era olvidar el pasado, pensar solo en el presente.

La posesión de nuevos reyes en la Tierra Media hicieron que las puertas de otros pueblos se abrieran; pero la puerta que se abriría para el ser catalogado como el más oscuro en Orthanc seria la puerta de el corazón de Faellas. El rey de Mordor en ese entonces, nacido en cuna de elfos; padre de su primer amor. Un dia en la frontera sur de Lothlorien, se encontrarian, para defender la frontera de el enemigo no eran necesarias las armas sino las palabras que pueden ser tan mortales como ser herido por la espada de un nazgúl.

"Una figura altiva y envuelta en su negra capa, camina hacia la frontera sur de Lothlorien, cabalga sobre un caballo negro de pezuñas melladas. Al llegar a los lindes descabalga y echa hacia atrás la capucha mostrando en contraste una faz gentil y fría de linaje elfico. Tirando de las riendas acerca su caballo a un viejo y seco tronco y allí las ata acariciando su hocico."1.

Faellas celaba a Lorien y sus servicios eran para el reino. Ennoia reinaba en ese entonces y las relaciones con Mordor eran solo una estrategia para derrotarlo.

-"Soberano de Mordor, quien se sienta en trono de sombras. Tanta luz en Lorien os haría daño... pero perdonad mi intromisión, no es de esta forma en que se debe recibir a los visitantes en Lorien. Permitidme recibiros como os lo merecéis."

Detrás de un gran árbol, la figura de Faellas se asoma y mira con serenidad a el soberano de Mordor. Sin mostrar simpatía alguna se acerca un poco:

-"Mis disculpas señor de Mordor, ¿que os a traído por aquí?...No hace mucho que habéis entrado en Lorien. Decidme ¿cómo os puedo ayudar el día de hoy?"-

Sin reflejar emocion alguno hacia el soberano, pero palabras que no eran para recibir a un enemigo, odiarlo o amarlo, unirse y resistirse. Un tira y afloja.

Y es que no se podia mostrar debilidad alguno hacia el soberano porque su fama llegaba aun mas alla de ser un poderoso enemigo. Los gentiles y halagadores saludos de Khalisto eran solo un inicio para debilitar a aquel centinela que fuese mujer. Con cada elfa o humana trataba diferente, pero con Faellas guardaba un grato recuerdo, aquella vez en la posada de Lorien pudo ver de nuevo bailar a la elfa, oir los cantos y el ambiente en donde habia nacido.

"-Muchas gracias señor, yo siempre a disposición de mi reina y tomando precaución-"Faellas sonrío burlándose.

-"¿Que ganaría si os dejase pasar señor?-"

Faellas miro con seriedad a Khalisto y luego soltó un suspiro de resignación
sabia que tenia que dejarlo pasar era el plan de su reina. Pero como requisito para el soberano de Mordor tenia que vendarle los ojos.

-"Muy bien os guiare con mi reina, pero si son asuntos de guerra créame que por más que no le agrede mi presencia, ni a mí la suya tendré que estar presente.

Déjeme decirle que aparte de ser la mejor bailarina en Lorien soy el general de este lugar, así que mucho cuidado con lo que decís-"

Introducción

Bienvenidos a este sitio donde escribire las historia de esta elfa de Lorien, y sus dias en la TM en una comunidad llamada la Torre de Orthanc. Esto es solo parte de sus crónicas, parte de su vida, tal vez la ultima etapa de su vida antes de partir hacia Occidente.

Espero que alguien lo lea, pues la ultima flor de lo que fue Lorien se marchito en el amor de un rey atrapado en la oscuridad.

Bienvenidos...!